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La batería térmica de Sunamp emplea un compuesto presente en las papas fritas de sal y vinagre.

La startup ha desarrollado un método resistente para almacenar energía solar en forma de calor, el cual puede utilizarse posteriormente para calentar hogares o proporcionar agua caliente.

Hace casi dos décadas, Andrew Bissell se encontraba en la sala de su casa frente al mar en la zona de Edimburgo, reflexionando sobre su futuro tras la venta de su startup de imagen médica junto a su esposa, Susan Lang-Bissell. Mientras hojeaba una revista científica, se topó con un artículo que hablaba sobre el cambio climático y la posibilidad de un aumento del nivel del mar de entre 30 cm y 1 metro para finales de siglo. Esto lo llevó a pensar que si esto sucedía, su hogar podría verse inundado varias veces al día, lo que le resultó inaceptable al considerar que muchas otras viviendas en todo el mundo estarían en la misma situación.

En lugar de unirse a Greenpeace, Bissell y su esposa decidieron fundar Sunamp. Junto con un laboratorio de la Universidad de Edimburgo, desarrollaron una tecnología para almacenar energía solar en forma de calor, creando lo que se conoce como una batería térmica. En el núcleo de esta batería térmica se encuentran tres compuestos: el acetato de sodio trihidratado (SAT), que también se utiliza como saborizante en papas fritas de sal y vinagre; agua; y modificadores de hábito cristalino.

El SAT ha sido empleado durante años en calentadores de manos, donde se calienta hasta disolverse en una solución sobresaturada. Cuando se activa, el SAT recristaliza, liberando calor. Aunque este proceso puede revertirse, hay un límite, ya que eventualmente el soluto se sedimenta y deja de recristalizarse. Para extender la vida útil del SAT, Sunamp incorpora un tipo de acrílico como modificador, lo que permite que el SAT se mantenga en la misma configuración sin deteriorarse con el tiempo.

Bissell describió este avance como algo "raro y emocionante", dado que la sustancia, denominada Plentigrade por Sunamp, puede durar hasta 40,000 ciclos de calentamiento, equivalentes a más de 50 años de uso diario. El objetivo de la empresa es aprovechar la energía renovable excedente, cargando la batería térmica en momentos donde el sol es abundante o en horarios de tarifas eléctricas bajas. Posteriormente, la batería puede liberar calor cuando la cristalización del SAT ocurre, como durante la noche o cuando el viento no sopla.

Sunamp ya tiene presencia en el Reino Unido e Italia y está en vías de expansión hacia otros países de Europa occidental y Estados Unidos. Actualmente, está levantando una ronda de inversión Serie B y está generando ingresos en el rango de "decenas de millones". Su primer producto de amplia disponibilidad, una batería térmica compacta para agua caliente, está dirigido a aquellos hogares en los que el espacio es limitado. Como señaló Bissell, "globalmente, tal vez la mitad de los hogares pueden permitirse el espacio para un tanque de agua caliente; nosotros estamos aquí para los que no pueden".

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