TikTok enfrenta más de una docena de demandas estatales por presuntamente perjudicar a adolescentes.
Los fiscales generales de los estados han asumido un papel destacado en las demandas relacionadas con la seguridad en línea.
Un grupo bipartidista de fiscales generales de 14 estados y distritos han presentado una demanda contra TikTok, acusándola de dañar la salud mental de los jóvenes y de engañar al público sobre la seguridad de su plataforma. Este grupo, encabezado por Letitia James de Nueva York y Rob Bonta de California, sostiene en sus demandas que la empresa ha violado las leyes estatales.
Bonta destacó que la investigación revela que TikTok fomenta la adicción a las redes sociales con el fin de aumentar sus ganancias. Según él, la plataforma apunta deliberadamente a los niños, quienes aún no poseen las herramientas necesarias para establecer límites saludables frente a contenido adictivo. Por su parte, James calificó estas demandas como un esfuerzo por “proteger a los jóvenes y ayudar a combatir la crisis de salud mental juvenil en el país”.
Las demandas argumentan que TikTok diseñó características y promovió contenido perjudicial para los niños, lo que ha permitido eludir en parte la protección que ofrece la Sección 230, la cual resguarda a los servicios de responsabilidad sobre el contenido generado por los usuarios. Los fiscales generales acusan a TikTok de implementar funciones adictivas, como la reproducción automática de videos, la promoción de contenido en vivo y de historias que están disponibles solo por tiempo limitado, además de ofrecer filtros de belleza en los videos. También se mencionan desafíos peligrosos que se han vuelto virales en la plataforma y que en algunos casos han estado relacionados con muertes de adolescentes.
Las autoridades alegan que estas conductas violan varias leyes, incluyendo el federal Children’s Online Privacy Protection Act (COPPA). Afirman que TikTok ha ofrecido beneficios económicos a partir de datos de menores de 13 años debido a "políticas y prácticas deficientes" que supuestamente han permitido el acceso de menores a su servicio. Además, se argumenta que TikTok ha engañado al público respecto a la seguridad de su plataforma para los niños. La demanda de Nueva York, por ejemplo, señala que TikTok violó la ley estatal de protección al consumidor al presentar su límite de tiempo de pantalla de 60 minutos como más estricto de lo que realmente es, ya que los adolescentes pueden usar un código de acceso para omitirlo.
Las demandas buscan que los tribunales frenen estas conductas perjudiciales y que se impongan sanciones financieras para la compañía. TikTok también se enfrenta a un peligro aún mayor: la posibilidad de ser prohibida en Estados Unidos si pierde una disputa legal en relación a una ley federal y no logra desinvertir de su empresa matriz china, ByteDance.
Un portavoz de TikTok, Alex Haurek, expresó que la empresa “no está de acuerdo con estas afirmaciones, muchas de las cuales considera inexactas y engañosas”. Haurek añadió que TikTok se siente orgullosa del trabajo realizado para proteger a los adolescentes y que continuarían actualizando y mejorando su producto. Afirmó que la empresa intentó colaborar con el grupo de fiscales durante más de dos años, y que es “increíblemente decepcionante” que hayan optado por este curso de acción en lugar de buscar soluciones constructivas para los desafíos de la industria.
Los fiscales generales estatales han tomado un papel destacado en demandas contra plataformas tecnológicas por el presunto daño a la seguridad de los menores. Por ejemplo, el fiscal general de Nuevo México, Raúl Torrez, ha demandado tanto a Snap como a Meta por facilitar la actividad de depredadores infantiles en sus plataformas. Además, varios estados presentaron una demanda contra Meta el año pasado por presuntamente engañar al público sobre los daños que causa a los jóvenes.
