ePlane busca aprovechar el interés del gobierno indio en los taxis aéreo con una nueva ronda de financiamiento de 14 millones de dólares.
ePlane Company de India ha conseguido 14 millones de dólares en una ronda de financiación Serie B, con el objetivo de llevar al mercado su taxi aéreo en 2026.
El aumento en la propiedad de vehículos privados y la disminución en el uso del transporte público y no motorizado han contribuido a un creciente problema de congestión vehicular en India, el país más poblado del mundo. Este desafío se ve agravado por la estrechez de las calles y las deficientes instalaciones de estacionamiento en las ciudades. En respuesta a esta situación, Nueva Delhi ha estado buscando alternativas para abordar estos problemas de manera rápida.
El primer ministro de India, Narendra Modi, anunció en un evento en septiembre que los taxis aéreos pronto serán una “realidad en India”, reflejando así el interés del gobierno en este nuevo modo de transporte. Además, la Dirección General de Aviación Civil de la India ha enunciado recientemente reglas para los vertiportos, sentando así las bases para la operación de los taxis aéreos.
Dentro de este contexto, ePlane Company, una startup fundada en 2019 por el profesor de ingeniería aeroespacial Satya Chakravarthy del IIT de Madrás, está desarrollando un vehículo eléctrico de despegue y aterrizaje vertical (eVTOL) llamado e200x. Este modelo se ha gestado meses después de que la empresa incursionara en el desarrollo de drones no tripulados para aplicaciones de carga y cámaras. Chakravarthy, quien también es cofundador y asesor de startups indias en el campo del espacio, como Agnikul y GalaxEye, explicó que ePlane ha asegurado derechos de propiedad intelectual en la creación de aeronaves centradas en el transporte intraurbano y de carga, con una velocidad de vuelo relativamente baja y una envergadura compacta de 8 metros, a diferencia de los típicos taxis aéreos que varían entre 12 y 16 metros. Esta característica les permitirá aterrizar en espacios restringidos y realizar múltiples viajes cortos, hasta 60 en un solo día con una sola carga. Según sus estimaciones, esto podría reducir el tiempo de viaje hasta un 85% y el costo no superaría el doble de lo que actualmente se paga por un viaje en Uber.
La mayoría de los vehículos eVTOL disponibles en el mercado son multicopters, similares a drones comerciales, que utilizan hélices y rotores verticales. Sin embargo, ePlane ha optado por un diseño de despegue más convencional que combina alas como un avión típico con rotores verticales. Esta configuración ha demostrado ser confiable al mantener la sustentación durante la transición entre el despegue vertical y el vuelo hacia adelante. Además, la empresa ha desarrollado una tecnología denominada "sustentación sinérgica", la cual permite que los rotores verticales operen incluso durante el vuelo hacia adelante, optimizando el diseño de las alas.
Chakravarthy reveló que ePlane produce componentes aeronáuticos en su instalación de IIT Madras, encargándose de partes del fuselaje, así como del diseño de asientos y hélices. Aunque la startup subcontrata la producción de celdas, ensambla las baterías en sus instalaciones para gestionar el centro de gravedad del avión. Su objetivo es lanzar comercialmente el taxi aéreo eléctrico entre mediados y finales de 2026, tras obtener las certificaciones necesarias de las autoridades indias y globales, así como completar los prototipos en la primera mitad de 2025. Para financiar este proyecto, ePlane ha asegurado una ronda de financiamiento Serie B de $14 millones, co-liderada por Speciale Invest y Antares Ventures de Singapur, con participación adicional de diversas empresas e inversores. Esta inyección de capital ha elevado la valoración de la startup a $46 millones, más del doble de su anterior valoración de $21 millones, lo que le permitirá avanzar en sus esfuerzos de certificación y comercialización a nivel global. El éxito en India podría abrir puertas a ePlane en mercados como Medio Oriente, Sudeste Asiático, Australia y Europa. Chakravarthy concluyó afirmando que lo que beneficie a India también podrá beneficiar al resto del mundo.