El mercado negro de GPUs Nvidia H100, A100 AI se dispara debido a sanciones de exportación impuestas por Estados Unidos, lo que lleva a compradores chinos a recurrir a técnicas imaginativas para obtener su preciada carga.
Los traficantes dicen que siempre hay una forma.
En octubre de 2022, la Administración de Biden informó sobre la imposición de restricciones en la venta de nuevos semiconductores a China con el objetivo de frenar el avance del sector tecnológico chino. Esta medida ha obligado a empresas como Huawei a volverse cada vez más creativas para evadir las restricciones, pero no es una tarea sencilla.
Estados Unidos bloqueó la importación de las avanzadas GPUs de Nvidia a China para reforzar el control sobre la tecnología crítica de inteligencia artificial. Esto ha provocado involuntariamente el surgimiento de un próspero mercado negro en el país. Compradores chinos, sin dejarse intimidar por las sanciones, están empleando tácticas notablemente ingeniosas para introducir de contrabando GPUs de alta gama de Nvidia como el H100 y A100.
Siempre hay una forma
Según informó The Wall Street Journal (WSJ), algunos viajeros están ahora ocultando chips avanzados de Nvidia en su equipaje. El medio revisó registros, incluidas declaraciones de aduanas, que mostraban que los chips de Nvidia estaban siendo adquiridos por compradores chinos en un mercado negro.
Un distribuidor en Beijing le contó a los periodistas del WSJ que recibe docenas de chips mensualmente, afirmando que "siempre hay una forma" de conseguirlos en China. Otro intermediario describió cómo utiliza contactos personales en canales de distribución oficiales y en integradores de sistemas en el sudeste asiático para obtener los chips, omitiendo los números de modelo en la documentación para evadir la detección.
En abril de 2024, Reuters informó que universidades chinas e institutos de investigación, incluidos la Academia China de Ciencias y el Instituto de Inteligencia Artificial de Shandong, lograron adquirir chips de Nvidia a través de revendedores.
A pesar de que las regulaciones más estrictas bajo la Regla de Chips de Computación Avanzada buscan frenar este flujo, el mercado negro sigue prosperando y adaptándose. A medida que la carrera tecnológica se intensifica, ambas partes están empleando medidas cada vez más sofisticadas para superarse mutuamente en este juego de gato y ratón tecnológico de alto riesgo.
