El CEO de Ghostery asegura que la regulación no nos protegerá de los rastreadores publicitarios.

Desde su lanzamiento en 2009, el panorama de la publicidad en línea ha evolucionado de manera significativa, y una de las herramientas clave en esta transformación ha sido Ghostery, que ayuda a los usuarios a identificar y bloquear las tácticas de seguimiento utilizadas por los anunciantes. A lo largo de estos años, Ghostery ha crecido substancialmente, alcanzando más de 100 millones de descargas, con aproximadamente 7 millones de usuarios activos mensualmente. En el mismo período, los principales navegadores han ido introduciendo características más orientadas a la privacidad, mientras que la Unión Europea intentó regular la situación con la legislación conocida como GDPR.

Con motivo del 15º aniversario de Ghostery, el CEO Jean-Paul Schmetz compartió su perspectiva sobre la estrategia de la empresa, el estado actual del seguimiento publicitario y su opinión sobre la regulación en relación con la privacidad en línea. Schmetz se unió a Ghostery en 2016, explicando que el cambio en la web se aceleró a partir de 2008, cuando surgieron nuevas dinámicas de seguimiento y publicidad, impulsadas, en parte, por el crecimiento de plataformas como Facebook. Inicialmente, un grupo de ingenieros comenzó a bloquear rastreadores, lo que llevó a la creación de Ghostery y otras herramientas similares.

La adquisición de Ghostery se produjo a través de Cliqz, una plataforma de búsqueda que buscaba un navegador que priorizara la privacidad. A diferencia de los navegadores convencionales que enfrentan dificultades para desafiar a gigantes como Google, Ghostery opera como una extensión, lo que permite a los usuarios continuar utilizando sus navegadores favoritos, como Safari o Chrome, añadiendo la protección contra el seguimiento. Schmetz enfatizó el diseño de Ghostery 10, que se centra en ofrecer una interfaz amigable para usuarios no técnicos, simplificando su experiencia al bloquear el rastreo en línea.

La conversación también tocó el aumento significativo en el número de rastreadores en la web. Aunque la introducción del GDPR inicialmente causó una disminución en el seguimiento, las empresas se adaptaron rápidamente a esta normativa, permitiendo que el rastreo aumentara nuevamente. Schmetz señala que, a pesar de los intentos de regulación, sigue habiendo una gran cantidad de seguimiento en Estados Unidos en comparación con Europa.

El CEO cuestionó la efectividad de la regulación y de las soluciones ofrecidas por las grandes empresas tecnológicas. A pesar de los esfuerzos de navegadores como Safari por implementar cambios, la respuesta ha sido limitada, ya que las compañías buscan mantener el equilibrio con los anunciantes y sus modelos de negocio. Ghostery, por otro lado, mantiene su compromiso de proteger a los usuarios, independientemente de la situación del sector.

En cuanto al uso de bloqueadores de anuncios, Schmetz destacó que, aunque puede parecer que su crecimiento se ha estancado, la necesidad sigue ahí, especialmente con la reciente posibilidad de implementar bloqueadores en plataformas móviles. Además, la dinámica entre YouTube y los bloqueadores se asemeja a un juego entre el gato y el ratón, donde los cambios en la plataforma generan reacciones de los usuarios hacia las herramientas de bloqueo.

Finalmente, se discutió la naturaleza del modelo de negocio de Internet, el cual ha estado basado durante años en la publicidad programática que depende de la recopilación de datos. Schmetz concluyó que, aunque la regulación puede ser un esfuerzo válido, el verdadero cambio vendrá de los usuarios que decidan proteger su privacidad, desafiando así el sistema establecido.

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