
Los cuatro mejores autos deportivos eléctricos que he probado: la electrificación no implica aburrimiento.
Desde MG hasta Maserati, estos vehículos eléctricos son sorprendentemente divertidos de manejar.
Una de las principales críticas hacia la electrificación de los automóviles de pasajeros radica en el eventual fin del motor de combustión interna. Después de 140 años de evolución, los motores que utilizan gasolina son probablemente los más eficientes, potentes y confiables que han sido en comparación con hace solo cinco años. Sin embargo, en el mundo de los automóviles deportivos, la potente maquinaria no solo proporciona un rendimiento explosivo, sino también una banda sonora inconfundible, una vibración que hace que se erice la piel y la emocionante sensación de manejar un robusto motor V6, V8 o V12. Los coches eléctricos nunca podrán reproducir esto de manera auténtica; a pesar de experimentar con sonidos de motor artificiales y bandas sonoras futuristas, los fabricantes no logran reemplazar lo que representa un motor de combustión para algunos entusiastas.
No obstante, esto no significa que debamos descartar los coches eléctricos. Tras probar varios deportivos totalmente eléctricos, es evidente que ofrecen algo muy diferente, ya sea un rendimiento increíble en línea recta, una experiencia de conducción sencilla o la posibilidad de transformarse en un tranquilo gran tourer al tocar un botón. Aunque los amantes de los coches de gasolina pueden disfrutar de un buen motor tradicional, es importante considerar la próxima generación de vehículos deportivos eléctricos como una propuesta completamente nueva. Pueden carecer de un sonido feroz, pero aún pueden ser realmente divertidos.
El primer modelo destacado es el Maserati GranCabrio Folgore, que se presenta como el primer roadster eléctrico de cuatro plazas del reconocido fabricante italiano. Equipado con una arquitectura eléctrica de 800V, cuenta con tres motores eléctricos que producen una potencia combinada de 818 hp en modo Max Boost. Sus cifras son impresionantes: una velocidad máxima de 180 mph, una aceleración de 0 a 62 mph en solo 2.8 segundos y una autonomía de 274 millas gracias a una batería de 83 kWh. Sin embargo, lo que más me impresionó al conducirlo por el campo británico no fue tanto su rendimiento a toda velocidad, sino su capacidad para deslizarse en casi completo silencio, ya sea con el techo puesto o bajado. Este Maserati destaca por su elegante diseño y comodidad en trayectos largos, aunque su autonomía puede resultar un inconveniente en viajes prolongados.
Otro modelo que merece mención es el MG Cyberster, un roadster eléctrico de la marca británica MG, bajo propiedad china. Con un diseño atractivo y puertas de tipo tijera, el Cyberster tiene el encanto de un clásico deportivo de dos plazas. En el interior, ofrece una serie de pantallas digitales que dan un toque aerodinámico y moderno. La versión GT, con doble motor, produce 503 hp, logrando el 0-62 mph en 3.2 segundos. Aunque no alcanza las cifras del Maserati, con un precio cercano a £60,000, es una opción más asequible que muchos competidores en el sector.
Por otra parte, el Hyundai Ioniq 5 N establece nuevos estándares en el segmento de los vehículos eléctricos. A pesar de compartir muchas características con el Ioniq 5 estándar, esta versión deportiva está diseñada para ofrecer un rendimiento atractivo, con 650 hp disponibles en modo N Grin Boost y una aceleración de 0-62 mph en 3.4 segundos. La experiencia de conducción se ve enriquecida por un sistema que imita los sonidos de un motor de combustión, haciendo que sea fácil olvidar que se está al volante de un eléctrico.
Finalmente, el Audi RS e-tron GT y el Porsche Taycan Turbo S comparten muchos componentes clave, destacándose en el mercado por sus capacidades de carga rápida y su estilo elegante. Ambos ofrecen un rendimiento impresionante, acercándose a los 280 millas de autonomía. El Taycan proporciona esa sensación de un Porsche clásico al ser llevado a altas velocidades, mientras que el Audi ofrece un enfoque más cómodo y tecnológico para viajes largos. Ambos modelos representan un avance significativo en la performance de los coches eléctricos, elevando el estándar de lo que puede ofrecer un auto moderno.