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El F80 de Ferrari emplea 'optimización de potencia' para ofrecer a los conductores más fuerza en los momentos clave.

Conoce al sucesor del LaFerrari.

El nuevo hypercar F80 de Ferrari cuenta con una innovadora capacidad para registrar el circuito en el que se está conduciendo y, además, ofrece un impulso al conductor en el momento adecuado durante la siguiente vuelta. Esta función denominada “Boost Optimization” analiza las rectas y curvas del trazado y, sin requerir acción adicional por parte del piloto, entrega más potencia a su sistema híbrido para ayudar a alcanzar el mejor tiempo de vuelta posible.

Los conductores pueden optar por el modo “Performance” para disfrutar de una cantidad constante de energía eléctrica durante el mayor tiempo posible, o elegir el modo “Qualify”, que maximiza la potencia de impulso en los momentos adecuados, a costa de un rápido agotamiento de la batería. A diferencia de los modelos SF90 Stradale y 296 GTB de Ferrari, este automóvil no cuenta con un modo de conducción completamente eléctrico.

El F80 presenta un tren motriz de tracción en las cuatro ruedas con un motor V6 trasero que genera 900 caballos de fuerza. Combinado con sus tres motores eléctricos, alcanza una potencia máxima de 1200 caballos de fuerza. La marca asegura que se trata de su "automóvil de producción más potente hasta la fecha". Estos motores eléctricos son los primeros completamente desarrollados y fabricados por la firma, basándose en el diseño del motor MGU-K utilizado en Fórmula 1.

Dos de estos motores eléctricos están ubicados en el eje delantero junto a un inversor y un sistema de refrigeración integrado, lo que permite vectorización de par y reduce el peso del vehículo. Además, un convertidor de corriente continua que proporciona 800, 48 y 12 voltios contribuye a la reducción de peso, ya que el F80 no necesita una batería separada de 48 voltios para alimentar sus sistemas de suspensión activa y e-turbo. El modelo también incorpora un sistema de control de lado deslizante con "gemelo digital" y aerodinámica activa que incrementa la carga aerodinámica durante las curvas para mantener un equilibrio óptimo.

La producción del Ferrari F80 está limitada a solo 799 unidades, cada una con un precio superior a 3 millones de dólares. Estas unidades ya han sido asignadas a clientes actuales.