Samsung inicia la fabricación de su unidad de estado sólido más rápida.
Las velocidades de lectura y escritura secuencial se incrementaron más del doble en relación a la generación previa.
Samsung ha hecho un anuncio significativo el 4 de octubre, comunicando el inicio de la producción masiva de su nuevo SSD, el PM9E1. Este dispositivo, que opera con la interfaz PCIe 5.0, se presenta como el que ofrece el mayor rendimiento y capacidad en el sector. Utiliza un controlador interno de 5 nanómetros (nm) y se apoya en la tecnología V-NAND de octava generación, promoviendo no solo una excelente velocidad sino también una mejora en la eficiencia energética, lo que lo convierte en una excelente opción para PCs que integran inteligencia artificial.
En comparación con su predecesor, el PM9A1, el nuevo SSD ha visto mejoras significativas en aspectos como el rendimiento, la capacidad de almacenamiento, la eficiencia energética y la seguridad. YongCheol Bae, vicepresidente ejecutivo de planificación de productos de memoria de Samsung, destacó que el PM9E1, con su controlador de 5 nm, establece estándares de eficiencia energética en la industria, brindando así una base robusta para la planificación de soluciones de inteligencia artificial.
El PM9E1 alcanza velocidades de lectura y escritura secuenciales que superan en más del doble a las generadas por la versión anterior, llegando hasta 14,5 gigabytes por segundo (GB/s) en lectura y 13 GB/s en escritura. Esto permite transferencias de datos altamente eficientes, incluso para aplicaciones que requieren un uso intensivo de recursos, como los modelos de lenguaje de gran tamaño, permitiendo que un modelo de 14 GB sea trasladado a la DRAM en menos de un segundo.
Este SSD se ofrece en varias capacidades de almacenamiento, incluyendo 512 GB, 1 TB, 2 TB y una impresionante opción de 4 TB, la cual es particularmente adecuada para quienes requieren espacio para archivos de gran tamaño, como contenido generado por IA y videos de alta resolución. Además, la notable mejora en la eficiencia energética, que supera el 50%, contribuye a una mayor duración de la batería, crucial en aplicaciones de inteligencia artificial integradas en dispositivos.
Desde el punto de vista de seguridad, Samsung ha implementado el protocolo SPDM v1.2, el cual incorpora tecnologías como "Canal seguro", "Autenticación de dispositivo" y "Atestación de manipulación de firmware", todo diseñado para mitigar riesgos de seguridad que pudieran surgir en la cadena de suministro.