Actor de Prometheus presenta demanda por el uso no autorizado de su avatar de inteligencia artificial en Venezuela.
Un avatar propagaba información engañosa promovida por el régimen de Nicolás Maduro.
Dan Dewhirst, un actor británico conocido por sus papeles en Prometheus, Dark Crystal y Bleachers, ha expresado su preocupación tras ver su imagen utilizada en una campaña de desinformación relacionada con Venezuela. Su avatar de inteligencia artificial se empleó como presentador de noticias, propagando información falsa atribuida al gobierno de Nicolás Maduro. Dewhirst dio a conocer su experiencia a través de un comunicado emitido por el sindicato de actores del Reino Unido, Equity, con la intención de alertar a otros sobre las implicaciones de firmar contratos que permiten el uso de avatares de IA.
En 2021, el actor firmó un acuerdo con la empresa Synthesia para convertirse en uno de los primeros intérpretes en ofrecer su imagen para crear un avatar digital. Aunque fue seleccionado para el papel, comenzó a tener dudas sobre las amplias cláusulas del contrato. Después de discutir sus inquietudes con su agente y Equity, intentaron modificar el acuerdo, pero no tuvieron éxito. A pesar de esto, le mostraron un documento que contenía condiciones que prohibían el uso del avatar para actividades ilegales o inapropiadas. Dewhirst manifestó su sorpresa al ver cómo sus peores temores se habían hecho realidad: "Soy literalmente la cara de las noticias falsas", argumentó.
Por su parte, un representante de Synthesia respondió a las preocupaciones de Dewhirst y otros actores, afirmando que la compañía se toma en serio la moderación del contenido y está consciente de los desafíos asociados con la creación de contenido dañino. Desde entonces, Synthesia ha implementado varias mejoras, como la prohibición explícita de la producción de contenido que simule noticias por entidades no informativas y el fortalecimiento de sus procesos de revisión de contenido.
El portavoz de la empresa explicó que son los únicos en su sector que aplican una extensa moderación de contenidos en el acto de creación. Este proceso incluye revisar los videos en cola con políticas de contenido mediante sistemas automatizados y moderadores humanos, lo que permite detectar la mayoría de los intentos de crear contenido problemático, como desinformación o fraude.