Cover Image for Norman y el NERD: Un informante de Google revela cómo la búsqueda de energía nuclear limpia se descontroló en una de las mayores empresas tecnológicas del mundo, con un extraño desvío hacia la fusión fría.

Norman y el NERD: Un informante de Google revela cómo la búsqueda de energía nuclear limpia se descontroló en una de las mayores empresas tecnológicas del mundo, con un extraño desvío hacia la fusión fría.

El programa NERD transformó la política relacionada con la energía nuclear y promovió la innovación en este campo.

Google ha estado involucrado en una serie de desarrollos innovadores, y su incursión en la energía nuclear destaca como un capítulo menos conocido de su historia. Esta exploración, que incluyó un inesperado desvío hacia la fusión fría y el aprendizaje automático, se llevó a cabo a través de alianzas, como la que estableció con TAE para mejorar Norman, una máquina destinada a experimentos avanzados de plasma. El programa NERD (Nuclear Energy R&D) de Google se enfocó en investigar la energía nuclear limpia, facilitando una serie de iniciativas que han generado atención en el ámbito tecnológico.

El interés de Google por la energía nuclear no se limitó al ámbito técnico; también buscó influir en las políticas relacionadas con el sector. En colaboración con organizaciones de reflexión como Third Way, la empresa trabajó para establecer un entorno normativo que favorezca el desarrollo de reactores nucleares avanzados. Estos diseños, que prometen mayor seguridad, eficiencia y mejores métodos de gestión de desechos, a menudo se ven obstaculizados por normativas obsoletas. Para contrarrestar este desafío, el equipo de NERD apoyó acciones legislativas que resultaron en leyes destinadas a modernizar los procesos de licenciamiento nuclear y a proporcionar financiamiento para proyectos demostrativos.

La iniciativa tuvo éxito, ya que el gobierno federal de EE. UU. comprometió miles de millones para respaldar una nueva generación de reactores nucleares, entre ellos los pequeños reactores modulares (SMRs). Recientemente, Google firmó un acuerdo para adquirir energía nuclear a partir de SMRs, lo que evidencia su compromiso práctico con el renacimiento nuclear.

En el ámbito de la fusión nuclear, Google combinó su capacidad computacional con la investigación en plasma en TAE Technologies. Un elemento clave de esta colaboración fue Norman, un reactor diseñado para calentar plasma a temperaturas extremas. Una herramienta de aprendizaje automático conocida como el "algoritmo del optometrista" jugó un papel fundamental al optimizar los ajustes del reactor, lo que permitió a los físicos refinar los experimentos de manera eficiente, logrando avances significativos en la estabilidad del plasma y el control de la temperatura.

Estos esfuerzos llevaron a TAE a alcanzar nuevas metas, ya que Norman superó sus objetivos iniciales. Las lecciones aprendidas en este proceso incentivaron el desarrollo de Copernicus, un reactor que busca lograr la "ventaja" energética, donde la producción de energía iguala al consumo.

Sin embargo, uno de los proyectos más inusuales de NERD fue la investigación sobre reacciones nucleares de baja energía (LENR), comúnmente conocidas como fusión fría. Aunque la credibilidad de la fusión fría se vio afectada por afirmaciones controvertidas en la década de 1980, Google abordó el tema con un enfoque científico riguroso. Mediante la financiación de 12 proyectos, la compañía buscó verificar si las anomalías en experimentos previos podrían conducir a un avance significativo. El resultado fue la falta de evidencia sobre la fusión fría, pero sí una abundancia de publicaciones revisadas por pares y aplicaciones inesperadas.

Las ambiciones de Google abarcan desde la transformación de la política nuclear en EE. UU. hasta el uso de aprendizaje automático en fusión, reexaminando, además, conceptos desacreditados. Este viaje poco convencional refleja la filosofía más amplia de la compañía: no hay idea demasiado grande, audaz o controvertida para ser explorada. Aunque no todas las iniciativas lograron sus objetivos, cada una contribuyó a una mayor comprensión del potencial de la energía nuclear.