El trabajo híbrido se impone a pesar de los intentos de los empleadores por regresar a la oficina.
Un informe revela que la mayoría de los empleados actualmente trabajan en un modelo híbrido.
La tendencia hacia el trabajo híbrido sigue en aumento, con un estudio reciente que revela que más del 60% de los empleados ahora adoptan este tipo de rutina laboral. La investigación, que incluyó a trabajadores de países como EE. UU., UK, Francia, Alemania, España, Suecia y los Países Bajos, muestra que aunque muchas empresas han intentado hacer que sus empleados regresen a la oficina, el modelo híbrido se ha consolidado.
El informe indica que un 63% de los encuestados se inclinan por una combinación de trabajo en casa y en la oficina. A diferencia de los inicios de esta modalidad, cuando la mayoría de los trabajadores permanecían en sus hogares, actualmente casi la mitad de los empleados pasan más del 50% de su tiempo en el lugar de trabajo físico, lo que señala un equilibrio entre las expectativas de las compañías y las preferencias de los empleados.
Además, el estudio resalta que dos tercios de los trabajadores cuentan con una oficina en casa, un aumento significativo respecto al 49% del año pasado. Esta tendencia refleja la normalización de espacios de trabajo remoto. A pesar de este crecimiento, algunas empresas aún presionan por un retorno al trabajo en la oficina, incluso algunas grandes tecnológicas han reconsiderado sus políticas de trabajo híbrido, optando por un retorno completo al entorno de oficina.
Expertos del estudio advierten que, aunque las organizaciones han avanzado en establecer una infraestructura técnica adecuada, corren el riesgo de descontento y rotación de personal si no toman en cuenta las preferencias de sus empleados. A pesar de la creciente preferencia por la flexibilidad, los trabajadores están comprometidos con su desarrollo profesional. Un 76% considera esencial el acceso a herramientas avanzadas para su crecimiento en la carrera, con una alta adopción de herramientas basadas en inteligencia artificial que ha mejorado notablemente la productividad.
De cara al futuro, se hace un llamado a las empresas para que prioricen la experiencia del empleado, lo cual debe incluir oportunidades de capacitación, un acceso democratizado a herramientas avanzadas y estructuras laborales flexibles.