Bluesky toma medidas contra las cuentas de parodia e impersonadores.
La plataforma de redes sociales descentralizada está tomando medidas más enérgicas contra los imitadores.
Bluesky Social está viendo un aumento significativo en su base de usuarios, pero esta afluencia está generando problemas relacionados con cuentas de imitación. Para abordar esta situación, la plataforma descentralizada ha decidido implementar una política más estricta respecto a las cuentas de parodia que no están debidamente etiquetadas. A través de un hilo en la cuenta de seguridad de la plataforma, se comunicó que las cuentas de parodia, sátira o fanáticos son permitidas, pero deben identificarse claramente en el nombre de pantalla y en la biografía para que los demás usuarios reconozcan que no son cuentas oficiales.
Además, Bluesky está intensificando sus esfuerzos contra lo que se denomina "cambio de identidad", una práctica en la que se crean perfiles de imitación con el objetivo de atraer seguidores y luego estos perfiles se rebrandan totalmente. Cambios en las políticas del servicio son justificados, ya que, según una investigación, el 44% de las 100 cuentas más seguidas en Bluesky tiene al menos un doppelganger.
La forma poco convencional en que Bluesky maneja la verificación ha propiciado el surgimiento de copias, especialmente con la llegada de celebridades y figuras políticas. Sin un proceso de verificación tradicional, los usuarios deben “autoverificarse” mediante nombres de dominio personalizados. Este método manual requiere que se agregue un texto específico en el registro DNS del dominio asociado. Por ejemplo, cuentas importantes como las del New York Times utilizan su propio dominio, como @nytimes.com, en vez del predeterminado @person.bsky.social.
Este enfoque también ha desencadenado un nuevo problema conocido como "squat de nombres", ya que aquellos que cambian a nombres personalizados a menudo deben mantener sus cuentas antiguas para evitar que los imitadores las secuestren.