Blue Origin de Jeff Bezos tiene previsto lanzar una nueva cápsula tripulada el lunes.
Blue Origin se esfuerza por rivalizar con SpaceX.
Blue Origin está ultimando los detalles para el lanzamiento de su misión NS-27, que utilizará la cápsula de tripulación RSS Kármán Line, programado para el lunes a las 9 AM hora del Este. Este lanzamiento marcará el debut de la cápsula, que según la empresa, contará con mejoras en rendimiento y reutilización, así como una nueva imagen y espacios adicionales para cargar en el lanzador.
Durante este vuelo, se transportarán dos sensores LIDAR que formarán parte del programa Lunar Permanence de Blue Origin, destinado al desarrollo de módulos lunares. En total, se enviarán a bordo 12 cargas útiles, que incluyen sensores de operación de proximidad de banda ultraancha, una reproducción de los monolitos negros de 2001: Odisea del Espacio, así como postales de estudiantes enviadas a la organización benéfica Club for the Future. La empresa ofrecerá una transmisión en vivo del lanzamiento a través de su sitio web, comenzando 15 minutos antes del despegue.
Si el lanzamiento del lunes se lleva a cabo según lo previsto, será el segundo vuelo de New Shepard desde mayo, cuando la compañía realizó su primer lanzamiento con tripulación desde 2022. Otro vuelo de New Shepard se completó en agosto.
El próximo vuelo del NS-27 se produce en un contexto en el que Blue Origin busca posicionarse como un verdadero competidor de SpaceX. El CEO de la compañía, Dave Limp, quien asumió el cargo a finales del año pasado, comentó en una entrevista que la empresa necesita "poder fabricar cosas de manera más eficiente" para convertirse en "un fabricante de clase mundial". Limp espera que para finales del año, la empresa logre entregar aproximadamente un motor a la semana, aunque no está seguro de que se alcance ese objetivo exacto, aunque sí anticipa que estarán por debajo de 10 días.
Además, Blue Origin tiene planes de lanzar el New Glenn, su lanzador reutilizable de gran tamaño, que recientemente completó su primera prueba de fuego del segundo étage, en noviembre. La compañía afirma que este cohete puede llevar hasta 45,000 kilogramos (más de 99,000 libras) a una órbita terrestre baja, un peso que según observaciones, es aproximadamente el doble de la capacidad del Falcon 9 de SpaceX. Blue Origin también espera conseguir aterrizar el lanzador en su primer vuelo.