Una Marie Curie de IA o un Robo-Galileo podrían realizar el próximo gran descubrimiento científico.
El primer científico de IA está ingresando al laboratorio.
La empresa japonesa Sakana AI ha presentado lo que se considera el primer "Científico AI", un modelo de inteligencia artificial capaz de realizar investigaciones científicas de manera autónoma. Este innovador sistema, respaldado por la colaboración de la Universidad de Oxford y la Universidad de Columbia Británica, busca acelerar el ritmo de los descubrimientos y la innovación en comparación con los investigadores humanos. Según la empresa, el costo de producir un artículo de investigación completo podría ser tan solo de 15 dólares.
El Científico AI es capaz de simular el proceso completo de descubrimiento científico, abarcando desde la generación de ideas hasta el diseño y ejecución de experimentos, así como la redacción de artículos científicos que detallan sus hallazgos para su publicación. Para iniciar el proceso, solo necesita un tema amplio y acceso a datos; luego puede analizar investigaciones previas, identificar preguntas sin responder y planear experimentos basados en estas ideas. Posteriormente, el modelo puede ejecutar un ciclo de refinamiento, ajustando sus propuestas según los resultados obtenidos.
En su etapa actual, el enfoque del Científico AI es el aprendizaje automático, un campo que, curiosamente, es el núcleo de su propia creación. Hasta el momento, ha generado técnicas inéditas para diferentes modelos de lenguaje y ha elaborado ideas sobre la evolución de estos modelos a partir de su entrenamiento. Esto podría facilitar el desarrollo de mejores algoritmos de aprendizaje automático y eventuales sucesores del Científico AI.
Sakana destaca que este modelo automatiza todo el ciclo de investigación, desde la generación de ideas innovadoras hasta la ejecución de experimentos y la visualización de resultados, además de la creación de manuscritos científicos completos. Se considera que este avance podría marcar el comienzo de una nueva era en el descubrimiento científico, democratizando y ampliando el acceso a la creatividad y la innovación frente a los desafíos más complejos del mundo.
Además, el potencial del Científico AI podría extenderse a diversos campos de investigación, como la protección ambiental, la medicina o la ciencia de materiales. Sin embargo, la aplicación de este modelo en nuevas disciplinas científicas requeriría esfuerzos sustanciales, ya que las capacidades actuales del AI se limitan a software de investigación, y la posibilidad de que genere información incorrecta o sin sentido sigue siendo un riesgo.
Aparte de Sakana, otras voces en el sector también están explorando el potencial del AI para realizar investigaciones independientes. Se rumorea que OpenAI está desarrollando su propio modelo denominado "Strawberry", que podría ser capaz de llevar a cabo investigaciones, aunque su enfoque parece orientarse más hacia la investigación complementaria en línea y la anticipación de preguntas humanas. Este enfoque demuestra el creciente interés y la evolución en el campo de la inteligencia artificial aplicada a la ciencia.
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