Las autoridades australianas frustran a cibercriminales en operación contra la cadena de suministro.

Las fuerzas policiales australianas han logrado desmantelar una red de comunicación delictiva gracias a una destacada operación de ataque a la cadena de suministro. Esta intervención resultó en la detención de numerosas personas acusadas de delitos, así como en la incautación de armas y drogas ilegales.

Hace aproximadamente nueve años, un cibercriminal de 32 años desarrolló una aplicación móvil llamada Ghost. Según informes de la policía federal australiana, esta aplicación estaba diseñada exclusivamente como una plataforma de comunicación encriptada para el mundo criminal. El cibercriminal instaló la app en teléfonos inteligentes modificados que luego vendía a un grupo selecto de usuarios. Cada dispositivo tenía un costo aproximado de 1,600 dólares y, en el momento de la operación, se estima que más de 300 teléfonos estaban en uso en Australia. Además, el creador de la app se encargaba de su mantenimiento, lanzando actualizaciones periódicas. En un momento dado, las autoridades lograron infiltrarse en la infraestructura del desarrollador, lo que les permitió comprometer una actualización próxima.

Cuando se instaló la actualización en los dispositivos, se les otorgó a los agentes el acceso al contenido allí almacenado. Esta información fue suficiente para iniciar la Operación Kraken, en la cual se llevaron a cabo 71 órdenes de registro, resultando en la detención de 38 personas, la incautación de 25 armas ilegales y la confiscación de 200 kilogramos de drogas. Además, las autoridades informaron que lograron evitar 50 actos amenazantes de violencia o asesinato.

Las acciones de la policía no se limitaron a Australia, ya que también se están realizando operaciones en países como Irlanda, Italia, Suecia y Canadá. Según el comisionado adjunto de la AFP, Ian McCartney, se estima que cientos de criminales —incluyendo miembros de organizaciones criminales italianas, pandilleros de motocicletas, y grupos del crimen organizado de Medio Oriente y Corea— utilizaron Ghost tanto en Australia como en el extranjero para importar drogas ilegales y llevar a cabo encargos de asesinato.

Este caso no es aislado, ya que las fuerzas del orden han logrado infiltrarse en otras plataformas de comunicación utilizadas por criminales. Un caso notable fue la incautación de la infraestructura de Sky Global, una app que supuestamente fue utilizada por algunos de los principales narcotraficantes de Europa.

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