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El Wolverine V3 Pro, el primer control de Razer con joysticks de efecto Hall, tiene un precio de 200 dólares y es compatible con Xbox y PC.

El Wolverine V3 Pro presenta por primera vez joysticks de efecto Hall en un control de Razer, convirtiéndose además en el primer controlador totalmente inalámbrico de la compañía.

Razer ha introducido innovaciones en su línea de controladores con el lanzamiento del Wolverine V3 Pro, el primer gamepad de la compañía que incorpora joysticks de efecto Hall y que, además, es completamente inalámbrico para consolas Xbox. Este controlador está diseñado pensando en los esports y el juego competitivo de alto nivel, y su precio es de $200. También se lanzará el Wolverine V3 Tournament Edition, una versión por cable que costará $100, ambos compatibles con Xbox y PC.

El Wolverine V3 Pro ofrece características mejoradas como bumpers adicionales para jugadores con agarre de garra, un D-pad flotante de ocho direcciones y switches de mouse Viper en sus cuatro paletas traseras, que se han rediseñado: ahora son barras horizontales en lugar de botones verticales. Las teclas del frente son microswitches con una membrana de goma y presentan una distancia de actuación de 0.65 mm, similar a su predecesor.

Este gamepad se conecta a la consola o PC mediante un dongle USB a través de una conexión inalámbrica de 2.4GHz, y cuenta con un Modo Torneo que permite una tasa de sondeo de 1000Hz, ajustable según las preferencias del usuario. Además, toda la personalización del controlador está disponible a través de la Razer Controller App, donde se pueden modificar opciones como la sensibilidad de los joysticks, la reconfiguración de botones y la fuerza de las vibraciones, así como crear perfiles de usuario.

El Wolverine V3 Pro se destaca como el modelo premium de su línea, con empuñaduras de goma, iluminación RGB en el logotipo frontal y viene con un estuche y accesorios, incluyendo un cable trenzado de 10 pies (USB a USB-C) y dos copas de joysticks intercambiables. La gran novedad son los joysticks de efecto Hall, una característica que promete eliminar el drift y facilitar un apuntado más preciso. Estos sensores están empezando a dominar el mercado de gamepads, aunque las grandes marcas como Sony, Xbox y Nintendo aún no han lanzado controladores que incorporen tecnología de efecto Hall.

En cuanto a la experiencia de uso, quien ha tenido la oportunidad de probar el V3 Pro señala que este controlador es ágil y posee un diseño compacto, adecuado incluso para manos pequeñas. Los botones son responsivos y los joysticks requieren un poco más de fuerza pero ofrecen una gran precisión. El diseño pone todos los controles al alcance del usuario, lo que facilita la jugabilidad. Las paletas traseras, aunque pueden parecer intrusivas para algunos, son cómodas de usar debido a su colocación.

En cuanto a la estética, el V3 Pro tiene un sutil detalle RGB, limitándose a iluminar el logotipo de Razer, lo que podría agradar a quienes prefieren un enfoque menos ostentoso. Por otro lado, la versión de $100, Wolverine V3 Tournament Edition, mantiene el mismo diseño y componentes internos que el Pro, pero sin las características inalámbricas, la iluminación RGB ni el estuche de transporte. Esta versión está prevista para salir al mercado a finales de septiembre de 2024.

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