
Warner Bros. aborda el problema del "daño en los discos" en sus DVDs de películas.
Los aficionados al cine que cuenten con una cuidadosamente seleccionada colección de DVD deberían revisar el estado de los discos de Warner Bros. que tienen en su biblioteca.
Los aficionados al cine que cuenten con una cuidadosa colección de DVDs deberían verificar el estado de sus discos de Warner Bros. Recientemente se ha descubierto que cientos de títulos fabricados por esta compañía entre 2006 y 2008 han sufrido un fenómeno conocido como “disc rot”. Este deterioro provoca que los DVDs se congelen, presenten fallas o incluso dejen de funcionar por completo durante la reproducción. La situación es preocupante, ya que los DVDs bien almacenados y cuidados no deberían deteriorarse tan rápidamente, lo que sugiere problemas graves durante el proceso de fabricación de estos productos.
Afortunadamente, Warner Bros. ha reconocido el problema y ha comenzado a ofrecer reemplazos para los discos defectuosos, aunque no reembolsos. Esta oferta se realiza solo si la película aún está en circulación y la compañía mantiene los derechos sobre el título. En una declaración, Warner Bros. mencionó que es consciente de los problemas potenciales que afectan a ciertos títulos de DVD y que están trabajando activamente con los consumidores para reemplazar los discos defectuosos. Además, agregó que donde es posible, se están reemplazando los discos defectuosos con el mismo título, pero también indicaron que si algunos de los títulos afectados ya no están en circulación o han expirado los derechos, se ofrecerá un intercambio por una película de valor similar.
El problema afecta a una amplia gama de títulos, incluyendo clásicos como la edición de Stanley Kubrick de 2001: Odisea en el Espacio, las películas de Superman hasta Superman Returns, así como series de televisión populares como Colecciones de Looney Tunes y Batman: La Serie Animada. A pesar de que Warner Bros. está tratando de minimizar el inconveniente causado a sus clientes, algunos coleccionistas podrían encontrarse con vacíos en sus bibliotecas de DVDs sin culpa alguna. Un comentarista que destacó este problema recientemente, mencionó que tras probar algunos de sus DVDs, se ha visto obligado a contemplar una colección de “posavasos costosos”.