VW y Rivian lanzan oficialmente su joint venture de 5.8 mil millones de dólares y presentan su equipo directivo.
Los automóviles subcompactos también formarán parte del acuerdo.
Volkswagen y Rivian han formalizado su nueva colaboración, que implicará una inversión de $5.8 mil millones y comenzará oficialmente el próximo 13 de noviembre. Este proyecto había sido anunciado en junio pasado, cuando Volkswagen expresó su intención de invertir $5 mil millones en Rivian para desarrollar nueva arquitectura eléctrica y software de vehículos, incluyendo modelos subcompactos, con un lanzamiento previsto para 2027. La inversión total ha aumentado a $5.8 mil millones.
La nueva empresa conjunta, denominada “Rivian and VW Group Technology, LLC”, será dirigida por Wassym Bensaid, responsable de software en Rivian, y Carsten Helbing, ingeniero jefe de tecnología de Volkswagen. Inicialmente, los equipos se establecerán en Palo Alto, California, además de planearse tres ubicaciones adicionales en Norteamérica y Europa. En esta colaboración, ingenieros y desarrolladores de ambas compañías se unirán para trabajar en el desarrollo de tecnología.
Rivian mostró un prototipo a un grupo selecto de periodistas en su oficina de Palo Alto; se trataba de un vehículo de prueba de Volkswagen equipado con el software de Rivian, desarrollado por el equipo de ingeniería de la joint venture en un período de doce semanas. Con el acuerdo cerrado, Rivian recibirá un préstamo inicial de $1 mil millones de Volkswagen, seguido de $1.3 mil millones en acciones de Rivian y otros $3.5 mil millones en los próximos años, según comunicó Oliver Blume, CEO de VW Group, en una llamada con medios.
La tecnología que surja de esta colaboración servirá como base para los vehículos de ambas marcas. Esto incluye el modelo R2 de Rivian, que se comenzará a producir en 2026, así como varios modelos del grupo Volkswagen, que abarcan marcas como Audi, Porsche, Scout y VW. Blume destacó la capacidad de escalabilidad de la nueva arquitectura electrónica, que podrá adaptarse a una amplia gama de vehículos, desde modelos compactos hasta automóviles de lujo.
La creación de esta joint venture representa una victoria significativa para Rivian, que ha enfrentado pérdidas sustanciales en el último año, acumulando más de $1 mil millones en pérdidas trimestrales. La compañía anticipa pérdidas ajustadas de hasta $2.88 mil millones para el año, cifra superior a la estimación previa de $2.7 mil millones. Asimismo, ha realizado varias rondas de despidos en los últimos dos años. Por su parte, Volkswagen también ha atravesado dificultades en el sector de vehículos eléctricos, enfrentando una contracción de su participación de mercado en Norteamérica a pesar de la buena venta de sus modelos híbridos. Este nuevo emprendimiento ofrece una oportunidad tanto para Volkswagen, permitiéndole acceder a la metodología centrada en software de Rivian, como para Rivian, que necesita este apoyo financiero en un entorno económico incierto.
RJ Scaringe, CEO de Rivian, manifestó que los fondos asegurados serán vitales para aumentar la producción del modelo R2 en su planta de Normal, Illinois, y para desarrollar una plataforma de vehículo eléctrico de tamaño mediano en su fábrica en Georgia, donde la construcción se había pausado. Aunque Scaringe no especificó cuándo se reanudarán las obras en Georgia, enfatizó que es un componente esencial de la estrategia de producción a largo plazo de Rivian.
Además, se ha sugerido que la nueva colaboración incluirá a Scout Motors, la marca de aventura propiedad de VW, que recientemente lanzó una nueva camioneta eléctrica y SUV. Bensaid mencionó que el software de Scout sería un producto de esta alianza con Rivian, y los dos grupos confirmaron que Scout se beneficiará de la nueva tecnología. Scott Keogh, CEO de Scout, afirmó que combinar la fabricación y tecnología estadounidense permitirá ofrecer vehículos que sus clientes deseen y aprecien, resaltando la importancia de una arquitectura de vehículo definida por software para satisfacer las necesidades de los consumidores.
