OpenAI presenta su propuesta favorita para la regulación de la IA en un nuevo 'esquema'
OpenAI ha dado a conocer un "plan" para el desarrollo económico y la regulación de la inteligencia artificial en Estados Unidos, que según la organización garantizaría el predominio tecnológico del país.
OpenAI ha presentado un "plan económico" para la inteligencia artificial, un documento en constante evolución que detalla las políticas que la empresa desea desarrollar en colaboración con el gobierno de los EE. UU. y sus aliados. Este plan, que incluye una introducción de Chris Lehane, vicepresidente de asuntos globales de OpenAI, destaca la necesidad de que Estados Unidos atraiga miles de millones en inversión para los recursos necesarios como chips, datos, energía y talento, con el fin de "triunfar en la inteligencia artificial". Lehane afirma que, mientras algunos países marginan el potencial económico de la IA, el gobierno estadounidense tiene la oportunidad de facilitar el liderazgo global del país en innovación y al mismo tiempo proteger la seguridad nacional.
OpenAI ha instado al gobierno estadounidense a que adopte medidas más concretas para regular la IA, argumentando que la regulación actual está fragmentada, ya que el gobierno federal ha delegado mayormente estas funciones a los estados. En el año 2024, se introdujeron casi 700 proyectos de ley relacionados con la IA en varias legislaturas estatales, algunos de los cuales presentan conflictos entre sí. Por ejemplo, la Ley de Gobernanza Responsable de la IA en Texas impone estrictos requisitos de responsabilidad para los desarrolladores de modelos de IA de código abierto.
El CEO de OpenAI, Sam Altman, también ha criticado leyes federales existentes, como la Ley CHIPS, que tenía como objetivo revitalizar la industria de semiconductores en EE. UU. atrayendo inversiones locales. En una reciente entrevista, Altman comentó que la Ley CHIPS "no ha sido tan efectiva como esperábamos" y consideró que hay una "real oportunidad" para que la administración de Trump lleve a cabo iniciativas más efectivas. Altman destacó que en EE. UU. la construcción de infraestructura se ha vuelto excesivamente complicada, lo cual es problemático para el liderazgo en IA.
Para desarrollar y mantener los centros de datos necesarios para la IA, el plan de OpenAI sugiere un aumento "drástico" del gasto federal en energía y transmisión de datos, así como una ampliación significativa de nuevas fuentes de energía, incluidos proyectos solares, parques eólicos y energía nuclear. La empresa, junto con sus competidores, ha apoyado anteriormente proyectos de energía nuclear, argumentando que son esenciales para satisfacer las necesidades eléctricas de los próximos centros de servidores.
En el corto plazo, el plan recomienda que el gobierno desarrolle "mejores prácticas" para la implementación de modelos, agilice la relación de la industria de IA con las agencias de seguridad nacional y establezca controles de exportación que permitan compartir modelos con aliados, mientras se limita la exportación hacia países adversarios. También se propone que el gobierno comparta información relacionada con la seguridad nacional que pueda afectar a la industria de IA, y que ayude a los proveedores a evaluar los riesgos de sus modelos.
OpenAI ya cuenta con algunos departamentos gubernamentales como socios En caso de que el plan sea adoptado, podría establecer más colaboraciones. Actualmente mantiene acuerdos con el Pentágono para proyectos de ciberseguridad y ha colaborado con la empresa de defensa Anduril para suministrar tecnología de IA para combatir ataques de drones. De acuerdo con el plan, se sugiere que se desarrollen estándares reconocidos por otras naciones en nombre del sector privado de EE. UU., aunque no se proponen reglas obligatorias.
El borrador también aborda el tema del copyright en relación con la IA, defendiendo que los desarrolladores deberían tener la capacidad de utilizar "información disponible públicamente", incluida la que tiene derechos de autor, para crear modelos. OpenAI argumenta que entrenar modelos de IA sin utilizar materiales protegidos sería "imposible" y ha enfrentado demandas de creadores que alegan que la empresa utilizó sus trabajos sin autorización. En este sentido, el plan establece que si EE. UU. y naciones afines no abordan este desequilibrio mediante medidas adecuadas, otros países aprovecharán este contenido para su propio beneficio económico.
No está claro cuáles aspectos del plan de OpenAI influirán efectivamente en la legislación futura. Sin embargo, el documento indica que la compañía está comprometida a ser un actor relevante en la formulación de una política de IA unificada en EE. UU. Durante la primera mitad del año pasado, OpenAI aumentó considerablemente sus gastos de cabildeo y ha incorporado a exlíderes gubernamentales en su equipo, además de apoyar iniciativas legislativas en favor de un organismo regulador federal para la IA y becas para investigación y desarrollo.