El telescopio Webb de la NASA identifica los primeros posibles enanos marrones fuera de nuestra galaxia.
Las enanas marrones son más grandes que los gigantes gaseosos, pero más pequeñas que las estrellas, y emiten muy poca luz. Gracias al telescopio James Webb, se ha logrado detectar...
El Telescopio Espacial James Webb está revolucionando la capacidad de detectar objetos celestes que antes se consideraban inalcanzables, lo que incluye hallazgos que podrían aportar al entendimiento sobre los orígenes del universo. Un grupo de astrónomos ha identificado por primera vez una "rica población de candidatos a enana marrón" fuera de nuestra galaxia. Esta observación fue realizada gracias al instrumento Near-InfraRed Camera (NIRCam) del telescopio.
Hasta el momento, se conocen cerca de 3,000 enanas marrones dentro de la Vía Láctea, pero el Webb ha permitido localizar candidatos a 200,000 años luz de distancia. Según Peter Zeidler, el líder del equipo de AURA/STScI para la Agencia Espacial Europea, "solo con la increíble sensibilidad y resolución espacial en el régimen de longitud de onda adecuado es posible detectar estos objetos a tales distancias". Zeidler también enfatizó que este tipo de detecciones nunca han sido factibles desde observatorios en la Tierra en el futuro previsible.
Las enanas marrones son objetos que no se clasifican ni como planetas ni como estrellas, y tienen una masa de entre 13 y 75 veces la de Júpiter, sin estar bajo la influencia gravitatoria de una estrella como los exoplanetas. Aunque son más grandes que los gigantes de gas, no son lo suficientemente grandes como para generar grandes cantidades de luz, lo cual les ha valido el apodo de "estrellas fallidas". Los científicos involucrados en este estudio sugieren que sus observaciones respaldan la teoría de que las enanas marrones se forman de manera similar a las estrellas, pero no llegan a acumular suficiente masa para convertirse en una estrella plenamente desarrollada.
De acuerdo a lo que indican los investigadores, podría ser que una "gran cantidad" de la masa del universo esté en forma de enanas marrones. Dado que son principalmente oscuras y apenas generan luz, podrían ser clave para resolver el problema de la "masa faltante" que los astrónomos aún están tratando de entender.
El nuevo grupo de candidatos a enanas marrones fue encontrado en un cúmulo estelar llamado NGC 602, que está ubicado cerca de los límites de la pequeña galaxia enana del Nube de Magallanes. Estudios previos realizados por Hubble mostraron que este cúmulo contiene estrellas jóvenes de baja masa, pero el Webb ha permitido examinarlo más detenidamente. Los hallazgos sugieren que este cúmulo se encuentra en un entorno que es comparable al del universo primitivo, lo que implica que el estudio de las enanas marrones podría ofrecer pistas sobre la formación de estrellas y planetas que ocurrieron hace miles de millones de años.