Los fiscales federales aún no logran acceder al teléfono celular de Eric Adams.
Han tenido el teléfono desde noviembre de 2023.
El alcalde de Nueva York, Eric Adams, quien fue acusado la semana pasada de delitos como fraude, soborno y solicitación de donaciones de nacionales extranjeros, informó a los investigadores federales que olvidó la contraseña de su teléfono móvil antes de entregarlo, según los documentos de acusación. Esta situación ocurrió hace casi un año, y los investigadores aún no han podido acceder al dispositivo, según lo indicado por los fiscales el miércoles.
Durante una audiencia en una corte federal, el fiscal Hagan Scotten mencionó que la incapacidad del FBI para acceder al teléfono de Adams representa un "factor significativo" en la investigación. En noviembre de 2023, el FBI obtuvo una orden de búsqueda para los dispositivos relacionados con Adams. El alcalde entregó inicialmente dos teléfonos, pero no tenía consigo su dispositivo personal. Los documentos de acusación no especifican el tipo de teléfono que utiliza.
Al día siguiente de la entrega de los teléfonos, Adams presentó su celular personal y, según los documentos, indicó que había cambiado la contraseña un día antes —tras enterarse de la investigación— y no pudo recordarla. Allegó que realizó este cambio de contraseña “para evitar que miembros de su personal borraran accidentalmente o intencionadamente el contenido de su teléfono”.
Incluso si la justificación de Adams no es verdadera (o si más adelante recuerda su contraseña), es posible que no esté obligado a proporcionarla a las autoridades. Varias cortes han dictaminado que, incluso en situaciones donde la policía posee una orden de búsqueda para un teléfono, el derecho de la Quinta Enmienda contra la autoincriminación impide que los investigadores obliguen a un sospechoso a revelar su contraseña. Generalmente, los códigos de acceso se consideran una forma de evidencia "testimonial" porque requieren que una persona revele sus pensamientos. Sin embargo, si el dispositivo de Adams contaba con Face ID o Touch ID, el FBI podría haber desbloqueado su teléfono utilizando biometría, que normalmente no se considera evidencia testimonial.
El FBI podría tener la capacidad de acceder al teléfono de Adams sin necesidad de su contraseña o huella dactilar, siempre y cuando cuente con las herramientas adecuadas. Tras no poder acceder al teléfono del autor que disparó en un mitin de Trump, los investigadores del campo de la oficina del FBI en Pittsburgh enviaron el dispositivo al laboratorio del FBI en Quantico, Virginia, donde los agentes lograron desbloquearlo en menos de una hora. Según se informa, en Quantico se utilizó una herramienta no divulgada de la empresa israelí de forenses móviles Cellebrite para acceder al teléfono. No obstante, expertos advierten que acceder al teléfono de Adams podría resultar ser "monumentalmente difícil" para el FBI.