Un meteorito cayó en su puerta y la cámara del timbre registró todo.
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Una cámara de timbre Ring captó la caída de un meteorito en la Isla del Príncipe Eduardo, Canadá, el 25 de julio de 2024. Laura Kelly y Joe Velaidum, una pareja que vive en la isla, registraron el instante en que un meteorito impactó su propiedad. El estruendo del choque se asemejó al sonido de un hielo rompiéndose. Este evento podría ser el primer registro en video de un meteorito que también recolectó su sonido.
Con la proliferación de cámaras de timbre, se han convertido en testigos involuntarios de diversas situaciones extrañas, desde paquetes frágiles arrojados por mensajeros hasta avistamientos de animales al acecho. Sin embargo, Velaidum expresó que este evento es incomparable. Según la Sociedad Meteoritica, el meteorito es uno de los 69 que se conocen por haber caído en Canadá. Velaidum compartió su asombro ante la improbabilidad de que un meteorito de cientos de millones de kilómetros de distancia terminara en su pequeño vecindario.
Del impacto, se recuperaron aproximadamente 95 gramos de escombros. La NASA estima que a diario caen sobre la Tierra cerca de 48.5 toneladas de material meteorítico, aunque la mayoría se vaporiza o se hunde en océanos, que cubren más del 70% del planeta. Hasta la fecha, se han identificado más de 82,000 meteoritos, la mayoría provenientes del cinturón de asteroides, aunque un pequeño porcentaje tiene origen en Marte y la Luna.
El día del incidente, Velaidum y Kelly estaban preparando a sus perros para un paseo. Al regresar a casa, encontraron un polvillo gris claro y piedras negras en forma de estrella en el camino. El impacto había dejado una hendidura de casi una pulgada en un ladrillo. Inicialmente, los propietarios pensaron que podría haber caído algo de su techo, pero luego de que los padres de Kelly mencionaran haber escuchado un fuerte estruendo, decidieron revisar la grabación del timbre. Fue entonces cuando se dieron cuenta de que había una roca cayendo del cielo.
Después de contactar al Sistema de Reporte de Meteoritos de la Universidad de Alberta, el curador de la colección examinó fotografías de los escombros. Indicó que, por lo general, la mayoría de los reportes de meteoritos resultan ser erróneos, aunque se sorprendió al identificar una costra de fusión en el material, lo que indicaba que efectivamente era un meteorito. Para confirmarlo, se requería llevar muestras al laboratorio. La pareja se afanó en recoger tantos restos como fuera posible, incluso utilizando un imán y, en un momento, un aspirador para recuperar más escombros.
Herd, el curador, planeaba visitar la Isla del Príncipe Eduardo poco después del incidente y aprovechó para evaluar la situación. Catalogó el meteorito como un chondrita ordinario, el tipo más común de meteorito rocoso. Los meteoritos se clasifican en "caídas" y "hallazgos"; las caídas son aquellas que han sido observadas en el momento de su impacto. Aunque es incierto si este meteorito es el primero en ser capturado con audio y video, se considera valioso desde una perspectiva de investigación.
El registro del video no solo documenta el momento exacto de la llegada del meteorito, sino que también puede ayudar a trazar su órbita. Además, se pueden analizar los frames de video para obtener información sobre el ángulo y la velocidad de la caída. La experiencia ha transformado a Velaidum, quien reflexionó sobre la fragilidad de la vida humana en contraposición a la inmensidad del universo, dejando una huella duradera en su perspectiva.